Cada término de febrero
que ahora me explico,
lleva el sonido anunciador
que asoma y que no termina,
una vez más este mes
no tendrá fin.
Pues cada recuerdo trae
lo que quisiste hacer,
más tu amargura termino,
con esa fatídica noche
en que mis pies desnudos
corrieron por doquier.
La oscuridad ni el mar fue bstáculo,
para no querer salir de allí.
Más no me angustie por mí
sino por lo que vi,
corrieron mil ideas que al final,
solo espantó la vida con pincel,
no fue más absurda
porque no lo quiso ser,
ahora sólo recuerdo
lo que quiero ser,
después de aquella noche
¿Quién quiere ser?
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